Capitulo 21: Escúchame ahora. (II PARTE)
De repente la puerta del cuarto de abrió dejando ver a Jared quién sostenía un oso de peluche en sus manos.
By Bill
¡Oh no! Esto estaba mal, muy mal. Cuando la puerta de mi habitación se abrió y vi que Jared estaba ahí solté a Tom rápidamente. Había sido un estúpido, Jared no se merece esto, soy su novio y lo haré feliz; el solo ah sido bueno conmigo. Ahora de seguro estaría enojado y yo tenía toda la culpa, tenía la culpa de haber caído en el juego de Thomas, tenía absoluta e irrevocablemente la culpa de seguir amándolo aunque no lo admitiera; aunque tratara de engañarme.
-¿Qué pasa aquí?– Pregunto mi novio. Se veía algo confundido, y es que no creo que fuera lo más bonito del mundo encontrarte a tu nuevo novio con su antiguo ex, tomados de la mano.
-Na… nada, estábamos ensayando pero Thomas ya se iba.-Le contesté rápidamente a Jared. Pase a un lado de Tom que solo había fruncido el seño cuando lo corrí sutilmente. Me paré enfrente del que ahora era mi novio y le di un casto beso en los labios, Jared puso una mano en mi cintura y otra en mi nuca haciendo el beso más intenso, pensé que no me correspondería; pero lo hizo.
-Cof, cof, cof…- Comenzó a Tom a toser, este se traía algo. Jared y yo nos separamos. –Tengo tos- Se excusó, como si no supiera que su “tos” era fingida, tan falsa como él.
-Sí bueno, cuando llegues a tu casa te puedes tomar algo, ya sabes- Le dije sonriendo falsamente, ¿Por qué no se iba? ¿Acaso no había oído que ya lo había echado de mi casa o solo se hacia el tonto para joderme la vida?
-Pero aún no hemos terminado Billy.- Volteé a ver a Jared, el solo nos miraba a ambos como tratando de descifrar que pasaba con nosotros. Pero no había pasado nada que lamentar, no nos habíamos llegado a besar. El hecho de que me hubiera tomado de las manos no contaba como engaño ¿Verdad?
-¿Acaso no habías dicho que ya se iba?- Jared ya se veía un poco molesto. Tenía razón para estarlo. Miraba retadoramente a Tom y esté le devolvía la mirada de igual manera.
-No, aún no hemos acabado.- Volvió a decir Tom. El también se veía molesto, y yo, bueno yo me moría de los nervios; no quería que se acabarán agarrando a golpes como le vez del centro comercial.
-Jajajaja, sí Tom, recuerda que ya te ibas- Me separé de Jared quién había estado rodeándome de la cintura todo el rato, como quien protege lo que es suyo; y me dirigía a un lado de Tom empujándolo sutilmente a la puerta. –Somos geniales, lo haremos muy bien el Lunes ya verás. –No le di ni tiempo a replicar ya que cuando iba a decir algo tomé su mano y lo jale fuera de mi habitación. –Ahora vengo Jared –Le sonreí mientras salía, seguro mi sonrisa se veía como la más falsa del mundo, y la verdad es que lo era. A uno lo amaba contra mi propia voluntad, aunque no quisiera, aunque me hiciera lo que me hiciera, aunque me hiriera tanto como pudiera… y al otro intentaba amarlo, en verdad que lo hacía. -¿Qué te pasa idiota? ¿Acaso no entendiste que quiero que te vayas?- Le susurré una vez que nos encontrábamos en el pasillo, no quería que Jared nos escuchará. Ahora en lugar de estar nervioso me sentía molesto, MUY molesto.
-Whooo, espera- Dijo poniendo sus manos frente a él en señal de que parará. –Más bien sería ¿Qué te pasa a ti?- Alzó la voz. Yo le hice un gesto con la mano para que bajara la voz. -¿Cómo se te ocurre besarlo frente a mí? ¿Cómo se te ocurre ser su novio siendo que tu al único que amas es a mí al igual que yo a ti?- Abrí la boca exageradamente “igual que yo a ti” ¡Que sínico!
-¿Qué me amas igual que yo te amaba a ti? ¿Enserio? ¿Entonces porque me engañaste con ese puto?- Y aquí venían las lágrimas de nuevo. Jodido marica estaba hecho. El no contesto nada, solo bajo la mirada. -¿Te sientes así porque lo besé? ¿Te imaginas como me sentí cuando los vi en la cama?- Ahora ni siquiera me miraba. – ¡Mírame joder!- Comencé a golpear su pecho con mis puños, las lágrimas seguían brotando de mis ojos. -¿Acaso soy tan poca cosa que ni siquiera merezco tu atención cuando te hablo?
-¿Qué?- Dijo agarrando mis puños que seguían dando contra su duro pecho, trate de zafarme. Me miro a los ojos. –Yo no creo que seas poca cosa, creo que eres lo más genial que me ah sucedido en este mundo; hasta ahora lo entiendo.- Deje de intentar soltarme de su agarre y me concentré en lo que decía. –Sé que cometí errores, pero soy solo un hombre.- ¿Esa era su excusa? ¡Qué tontería! ¿A mí porque me tomaba entonces?
-¿Entonces yo que soy?- Dije algo molesto. -¿Acaso no me consideras un hombre? –Por fin me pude soltar y me aleje de él. Se llevo las manos a la cabeza, parecía frustrado.
-Ya estamos suficientemente mal como para que trates de mal interpretar lo que digo Bill. Me refiero a que tus eres más… hmmm no sé cómo explicarlo. –Yo solo giré los ojos y me voltee hacia otro lado, ¿Ahora con que gilipollez me saldría? –Tú eres un ángel ¿Sí?- ¿Qué? ¿Había oído bien? Me giré de nuevo a verlo –Tú eres un ángel hermoso al cual nunca debí herir y quiero que sepas que estoy muy arrepentido de todo lo que hice–La mirada se le puso acuosa y se le escapo una lágrima, nunca lo había visto llorar, ahora ambos lo hacíamos.-Tu cambias las cosas, tú me cambiaste el juego.- Parecía tan convincente… ¿Debía creerle o no? –Me duele mucho que seas su novio.
Nos miramos, ninguno hacia nada. Suspiré… si todo eso me lo hubiera dicho antes, cuando aún éramos novios me lo hubiera comido a besos y le abría dicho que sí a cualquier cosa. Ahora todo lo que podía hacer era pedirle amablemente que se fuera y quedarme con todo lo que sentía. Bajé la mirada el intento acercarse a mí pero yo me aleje más. Recordé que Jared seguía en mi habitación y ya había tardado mucho.
-Bien, es hora de que te marches Tom, Jared me está esperando.-Dije secándome las lágrimas. El solo asintió.
-Entiendo. –Fue todo lo que dijo antes de dar la vuelta lentamente y desaparecer por el pasillo. Me derrumbé, de nuevo. Él electrizaba mi vida.
Me dirigí al baño que estaba en la habitación de huéspedes ¡No podía dejar que Jared me viera así! Me lavé la cara, tenía el maquillaje corrido. Una vez que me sentí un poco mejor regrese a mi habitación.
Abrí la puerta lentamente y no vi a Jared por ningún lado. Volteé hacia la puerta que daba hacia el balcón y vi que estaba abierta, seguro el estaba ahí. Salí y pude ver que Jared estaba recargado en el balcón, se veía pensativo, tal vez ahora si se había enojado porque tarde con Thomas. El no me miró cuando llegue solo veía el bello jardín de mamá.
-Lo… lo siento. –Hable una vez que estuve a su lado y me recargue igual que él en el barandal. Giró su cabeza para verme.
-No hay problema Bill… Confió en ti. –Me sonrió. Me sentí tan mal al recordar que había estado a punto de besar a Tom. Se giró completamente y me abrazó, yo solo me recargue en su pecho y comencé a llorar. No podía más, mi cabeza estaba tan confundida… ¿Tom decía la verdad o no? ¿Me amaba o no? Jared comenzó a acariciarme la cabeza, pasaba sus dedos entre mi cabello… no decía nada; agradecía que no lo hiciera y estuviera ahí para levantarme cuando caía.
-Lo siento tanto Jared… tu… tú te mereces alguien mejor que yo.- Comencé a llorar otra vez ¿Acaso mi vida siempre sería así a partir de ahora?
-Ssshhhh no digas nada. –Puso una mano en mis labios y con la otra seco las lágrimas que resbalaban por mis mejillas. Nos miramos a los ojos. –Se que aún lo quieres, y aún así te pedí que fueras mi novio. Así que no tengo nada que reprocharte. –Tan dulce…- Tú aceptaste y me hiciste el hombre más feliz sobre el planeta. Sé que haré lo que sea con tal de verte feliz, no me importa que no me ames. También sé que me estás queriendo cada día más y tratas de olvidarte de él y te agradezco que me hayas dejado entrar en tu vida. No me molesta pensar que tengo que esperar para llegar a tu corazón. – Amaba que me hablará de esa forma, que fuera tan lindo, dulce y comprensible conmigo. Lo besé, lo besé con fuerza, como nunca lo había hecho antes. Al principio se sorprendió pero me correspondió el beso.
Nos separamos, el tenía una gran sonrisa en el rostro; le había encantado que lo besará.
-Woooaoo, Eso fue genial Billy –Yo solo sonreí sonrojado. –Mira te traje esto.- Me tendió un hermoso peluche.
-Awww muchas gracias.-Lo besé de nuevo, de repente necesitaba tanto sus besos…
Entramos de nuevo a mi habitación y comenzamos a hablar de muchas cosas y de nada en particular. Le decía lo que me gustaba y él me decía lo que le gustaba a él; nos estábamos conociendo. Las horas transcurrieron y se hizo muy tarde. Él se fue a su casa y yo me acosté a dormir. Estaba tan cansado que no me costó trabajo hacerlo.
El fin de semana paso sin novedad, yo me quedé en casa viendo películas ya que Jared fue a hacer la tarea de la canción con la chica con la que le había tocado, por lo tanto no tenía nada que hacer. Ya en la noche acomodé mis cosas y me dispuse a dormir.
Lunes, de nuevo a comenzar otra estúpida semana.
Me levante de la cama lentamente, no tenía ganas de ir a la escuela pero debía de hacerlo o sino el profesor de música me reprobaría. Todo el fin de semana me la había pasado pensando en él y en todo lo que me había dicho. Hoy teníamos que presentar las canción… ¡Estúpida canción! Si no fuera por ella yo estaría perfectamente pensando en solo hacer feliz a Jared. Giré la cabeza y pude ver que en el buró que estaba alado de mi cama se encontraba el osito de peluche que me había traído Jared; por lo general cuando Tom lo hacía era para que lo perdonara por algo que había hecho mal. No quise pensar más en eso así que me dirigí a la ducha.
Me bañé, maquille y me vestí; no por estar triste andaría fachoso. Estaba sentado en la cama acomodando mis libros, cuando de repente sonó mi celular. Lo tomé y pude ver en la pantalla que se trataba de Jared.
Te amo y verás como tú también lo harás bonito. Nos vemos en un rato.
Suspiré, yo también quería creer eso, creer que lograría amarlo; pero yo sabía que cada día lo estaba queriendo más. Rápidamente conteste…
Te quiero, y pondré todo mi esfuerzo en hacerlo cada día más.
Tomé mis cosas y me encaminé hacia mi auto para llegar a tiempo a la escuela.
Una vez que llegue estacione mi auto y pude ver que Tom estaba ya ahí recargado en el suyo. Me observaba y me puse muy nervioso. De pronto sentí como alguien me rodeaba de la cintura.
-Hola hermoso. –Dijo robándome un beso. Sonreí, era mi novio.
-Hola- Me recargue en su pecho, el beso mi frente.-Entremos o se nos hará tarde.
Empezamos a caminar, pasamos alado de donde se encontraba Thomas, Jared me apego más a él; yo solo desvié la mirada pero pude notar que se nos había quedado viendo. Justo cuando entramos a la escuela el timbre sonó y todos los de mi clase nos dirigimos al salón de Música. Nos sentamos igual que siempre, Andy conmigo y Jared atrás de nosotros. Jared se puso a hacerle unos arreglos a su canción con la chica, así que yo aproveche para hablar con Andy.
Le conté rápidamente todo lo que me había pasado, así como también le dije que ya era novio de Jared, al principio se sorprendió pero se puso muy feliz y nos felicito a ambos. Volteé hacia atrás y note que Tom parecía muy molesto. Me preguntaba si era porque ahora era novio de Jared o porque el puto de Andrej no dejaba de acosarlo. Le agarraba las trenzas, trataba de besarlo pero el solo giraba la cara y le pedía que se alejara. Cuando vi que hizo eso me sentí un poco mejor. De repente nuestras miradas se encontraron y yo me giré rápidamente, no quería que notara que aún me interesaba en lo que hacía.
El profesor llegó y todos le pusimos atención.
-Muy bien, espero que todos traigan buenas canciones ya que de eso contará si pasan el semestre o no. Ahora que pase el primer dúo. –Dijo, y así comenzaron a pasar todos.
Cuando paso Andy con Zack fue tan tierno, su canción también hablaba de amor. Cuando se veían sonreían… sonreí, mi mejor amigo me tenía que contar que pasaba ahí. Paso Jared con la chica y en todo el tiempo que él estuvo cantando solo me veía a mí. Tenía una hermosa voz.
Ahora era mi turno, mejor dicho nuestro turno. Me levente al igual que Tom y me senté en un banco que estaba justo delante del piano; él por obvias razones se sentó detrás de esté. Nos miramos, entonces yo le indique que podía empezar. El piano comenzó a sonar y él a cantar.
Lo deje todo detrás de mí
En busca de la fuerza que pensé
Había dentro de mí
Me dejaste atrás
Tan solo
Orando por el día en que de alguna
Manera me encontraras
Yo era joven
Te equivocaste
Pero he intentado
Yo era fuerte
Y los años que he perdido son todo lo que veo
Escúchame ahora
Todo lo que puede decir
Es que no tengo miedo
Del mundo que tratado de alejar
Yo lucho todos los días
Pero yo tengo la culpa
No soy inocente
Pero no tengo miedo
Ahora no podíamos dejar de mirarnos, trataba de hacerlo pero simplemente su mirada me tenía atrapado. Cantaba con tanto sentimiento…
He perdido toda la confianza
Dentro de mí
Todavía me encuentro sin voluntad de…
Libérame de ti
Soy un esclavo infeliz
Querer tanto para algún día
Verme
Dime como
Te Quiero
Dilo en voz alta
Te necesito
Para ser quien capture todos mis sueños
Escúchame ahora…
Todo lo que puede decir
Es que no tengo miedo
Del mundo que tratado de alejar
Yo lucho todos los días
Pero yo tengo la culpa
No soy inocente
Pero no tengo miedo
Nunca más
No tengo miedo
Nunca más…
Estoy cansado de dormir
Solamente he estado de duelo
La vida que deje de sentirme vivo
Quiero sentirme vivo…
No pude evitar que sus palabras me conmovieran ¿Acaso si sentía todo eso? Cantaba como si en verdad lo hiciera. Me sequé las lágrimas con mis manos.
No tengo miedo
Nunca más
No tengo miedo
Nunca más
No tengo miedo
Quiero sentirme vivo
Nunca más
Quiero sentirme vivo
No tengo miedo
Quiero sentir, necesito sentir
Nunca más
Quiero sentirme vivo
Agárrate fuerte
Vamos a hacer esto bien
Tómame, hazme sentir
Vivo esta noche.
La canción había terminado, ambos nos encontrábamos sumergidos en los ojos del contrario. Un aplauso se escucho y fue cuando desvié la mirada hacia la clase de nuevo. Era el maestro el que nos aplaudía.
-Muy bien Kaulitz y Trümper- Dijo el maestro parándose de donde estaba y dirigiéndose hacia nosotros.-Esto era lo que quería… pasión, entrega, amor.- Nos palmeó la espalda cuando estuvo alado de nosotros. Yo volteé la vista hacia otro lado cuando dijo todo eso, me hice el tonto, como si no hubiera escuchado nada. Dirigí la mirada hacia Jared y el solo me sonrió aunque parecía triste. Volteé a ver a Andrej, bueno, el estaba que sacaba humo y su “amiga” si es que así se le puede llamar a Chantelle, trataba de calmarlo. Me miraba furioso, yo solo le sonreí burlonamente.-Sabía que lo harían bien chicos.-Nos susurro el maestro solo a nosotros. Tom sonrió ¿Estaban comploteando contra mí para que lo perdonará o qué? Nos miramos de nuevo y Thomas me sonrió, yo aunque no había querido hacerlo le correspondí la sonrisa. ¿Por qué tenía que ser tan encantador cuando se lo proponía?
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